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El tercero medio “A” es el curso con más estudiantes extranjeros de todo Colegio Polivalente San pedro de Quilicura. La mayoría son haitianos pero también hay venezolanos, peruanos, colombianos y uruguayos. Sebastián Galdames (32) es su profesor jefe.
«Ha sido muy enriquecedor el trabajar en un aula multicultural. Es desafiante porque llegan alumnos extranjeros que ni si quiera hablan castellano. Pero ellos de verdad le ven el valor a la educación, mucho más que sus compañeros chilenos. Ellos saben que la educación es la forma de salir del contexto difícil en el que viven», reflexiona Galdames, quien es agrónomo de profesión y comenzó a hacer clases en 2018 como parte del Programa de Liderazgo Colectivo de Enseña Chile.
Dentro de la sala el profesor ha tomado medidas para mejorar la experiencia de aprendizaje de sus alumnos extranjeros. Por ejemplo, durante los primeros meses del año escolar pide que un estudiante haitiano que lleva más tiempo en Chile traduzca su clase al creol, lengua hablada en Haití. Así el resto de sus compañeros que aún no hablan castellano pueden entender la clase y aprender.
«Creo que ha sido el proceso de aprendizaje más grande que he tenido. He visto que puedo aprender todos los días con los estudiantes. De sus vivencias y de cómo han sobrellevado las dificultades en sus vidas», reflexiona el profesor.
Según Galdames el colegio ha trabajado para lograr la integración. Por ejemplo, a principio de año se definió que el valor del respeto iba a ser el pilar del trabajo de orientación en todos los niveles, porque el bullying es uno de lo principales problemas que enfrentan.
«El colegio está recién tomando acciones con respecto a esto. Los acuerdos los generamos a principio de este año. Tenemos que sentarnos a discutirlo más para llegar a todos los estudiantes», opina Galdames.
Sin embargo, el poder para cambiar las cosas está en las manos de los propios estudiantes, considera el profesor. «Mis alumnos extranjeros tienen muchas ganas de aprender. Uno los desafía y están siempre dispuestos a avanzar más, se quedan después de clases y todo. Son tremendamente autónomos y avanzan muy rápido», reconoce orgulloso.
