Camila Rivas conoció Enseña Chile mientras buceaba por internet. "Siempre he tenido vocación por la enseñanza y, al leer el perfil del rol de PeCh, me di cuenta de que describían perfectamente mis habilidades”. De profesión Astrónoma, Camila se vio identificada con los valores y propósitos de la fundación, lo que la hizo embarcarse en este viaje en la sala de clases.
Antes de ingresar, estaba viviendo un proceso de orientación vocacional. "Había postulado a tres cargos relacionados con mi área de ciencia y programación y, a medida que avanzaban las etapas de selección, me vi en la necesidad de tomar una decisión”, narra. Fueron las oportunidades de aprendizaje, el recibir acompañamiento y descubrir si su vocación era la pedagogía, las razones que la impulsaron a entrar al programa de Enseña Chile.
Hoy se desempeña como profesora de Matemáticas en la Escuela Dr. Óscar Marín Socias en la Región de Valparaíso. Camila cuenta que su experiencia ha estado llena de aprendizajes y desarrollo de habilidades que no solo enriquecen la enseñanza de sus estudiantes, sino que también aportan valor a cualquier ambiente profesional.
“La resolución de problemas es esencial ante situaciones imprevistas, lo que te obliga a tomar decisiones rápidas y efectivas. La comunicación asertiva permite expresar ideas y expectativas de manera clara, fomentando un ambiente de respeto y aprendizaje. La adaptabilidad es clave para ajustar los métodos según las dinámicas del aula, mientras que la empatía te ayuda a conectar con los estudiantes, comprendiendo sus emociones y necesidades. Finalmente, el autocontrol emocional es fundamental para manejar el estrés y las dificultades del día a día, asegurando un entorno de calma y profesionalismo”, describe con respecto a todo lo que ha adquirido en su paso por la sala de clases.
Camila también rescata de su experiencia la enriquecedora relación que se ha generado tanto con su comunidad educativa como con la red de Enseña Chile. “Cuando lo he necesitado he sentido el apoyo de colegas, estudiantes y sus familias, lo que ha facilitado mi integración y me ha permitido entender mejor las dinámicas y necesidades del entorno. He aprendido mucho al colaborar con otros docentes y personal del colegio, compartiendo estrategias pedagógicas y trabajando en equipo para enfrentar desafíos comunes” cuenta sobre la experiencia en la escuela.
Por el lado de la fundación, Camila relata que “la red me ha brindado un constante apoyo, haciéndome sentir reconocida, valorada y acompañada. He experimentado un respaldo genuino que ha sido fundamental para mi crecimiento y para enfrentar los desafíos con confianza”.
A todos aquellos profesionales que estén pensando en postular al programa y convertirse en agentes de cambio para la educación del país, Camila les recomienda que estén abiertos a enfrentar su vulnerabilidad. “El programa es para gente valiente que quiere salir de su zona de confort, y día a día desafiar su creatividad y liderazgo”.
Sin embargo, cierra con el mensaje de que quienes finalmente pasen por la sala de clases, no estarán solos. “Enseña Chile brinda el apoyo necesario. Durante los dos años de programa tendrás a tu mentor o mentora con la mejor disponibilidad para ayudarte a tener una visión de oportunidades ante los desafíos de la docencia", finaliza.