Con la masiva llegada de migrantes al país -hoy en Chile residen 1,2 millones de extranjeros- los colegios recibieron rápidamente una gran cantidad de alumnos cuyas culturas no eran conocidas por su comunidad. Es por esto que Pamela Isla (32) decidió fundar Derriba Frontera, una organización que busca apoyar la educación intercultural en Chile y que es una de las ganadoras de Incuba Enseña Chile 2019.
Pamela conformó un equipo de sociólogos, psicólogos e ingenieros para elaborar una propuesta con el fin de ayudar a los entornos educativos a recibir de mejor forma esta nueva realidad. “Soy profesora de educación básica y sé que los profesores no están entrenados para una educación multicultural”, afirma.
Esta idea se materializó en forma de talleres durante 2018. Por 45 minutos, cada dos semanas, los alumnos de dos liceos de Renca acomodaban sillas y mesas a los costados de la sala y formaban un círculo. Todos se miraban a la cara y los monitores comenzaban a discutir de interculturalidad, migración y Derechos Humanos. Después la acción pasaba a ellos, con representaciones que usaban las herramientas del teatro los niños debían interpretar esos conceptos.
“Buscamos que en el día a día de la escuela, en la sala de clases y entre los estudiantes, exista una relación horizontal, donde las culturas no estén unas sobre otras. Todos se deben sentir de igual manera, considerados e importantes”, reflexiona la emprendedora.
Pero Derriba Frontera quiere ir más allá. Después de la experiencia del año pasado actualmente están negociando con cuatro comunas para llegar a más niños y adolescentes con sus talleres de interculturalidad. Los buenos resultados obtenidos en Renca han sido el principal argumento para llevar su proyecto a otros niveles, que además incluye encuestas de percepción sobre la migración y talleres de sensibilización para los profesores.
En el futuro, esperan impactar más directamente en los docentes. Según datos propios recogidos en Renca, al menos el 30% de los profesores tienen una mirada negativa de la migración. El objetivo es ofrecer formación para los educadores, con el fin de que ellos hagan los talleres directamente y que Derriba Frontera se dedique al acompañamiento de las comunidades que se sumen a este desafío.