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La conmemoración del Día Internacional de la Mujer da pie para compartir y reflexionar en torno a los testimonios y experiencias de las mujeres en distintas áreas. En educación, por ejemplo, muchas han liderado el trabajo por un Chile más justo desde el terreno. Así lo ha demostrado la experiencia de Enseña Chile que en su amplia y diversa red de estudiantes, docentes y equipos directivos encuentra muchos ejemplos de ello. Les presentamos las voces de tres mujeres que a través de sus relatos demuestran la importancia del rol cumplen en el sistema y la potencialidad que tienen de generar cambios profundos desde su ámbito.
Ester Huenchufil es directora del Colegio Vencedor de Puerto Varas, Región de Los Lagos. Llegó al establecimiento en 2004, cuando tenía otro nombre y otra entidad sostenedora. A inicios del año siguiente asumió como directora, primero de manera temporal y luego de forma definitiva. En 2015, después de una crisis interna donde el colegio estuvo a punto de cerrar, decidió comprar la sociedad y convertirse en sostenedora del proyecto. Tras todos esos desafíos, actualmente el Colegio Vencedor tiene una matrícula de 522 estudiantes y sale adelante cada día.
«Como mujer, sí, está en mis manos aportar al mejoramiento de la educación en Chile. Desde el día uno he promovido una educación cercana, una educación con amor. Creo que poseo un don y es que puedo conectar fácilmente con las personas, porque soy honesta, porque he vivido lo que promuevo y eso lo pone un poco más fácil», cuenta desde su experiencia liderando en educación.
Valentina Daniels es estudiante de primero medio del Colegio Nirvana de Alto Hospicio. Tiene 14 años y junto a su hermana y un grupo de ocho amigas es parte de Consciencia Femenina, una organización feminista que fundaron en marzo de 2019 en su colegio para organizarse y reflexionar en torno a la sororidad. Actualmente comparten sus reflexiones y aprendizajes en el Instagram @_.consciencia_femenina._ y esperan a futuro poder crecer como organización y conectarse con otros grupos feministas de la comuna y la Región de Tarapacá.
«A las niñas que están interesadas en trabajar en esto les digo, primero que nada, que se hagan notar. A las niñas nos ven pequeñas y a veces no nos toman mucho en cuenta, así que hay que tener pensamiento firme y que nadie las detenga», reflexiona Valentina sobre la importancia de levantar las voces de las niñas desde temprana edad.
Isidora Urquiza es profesora de Enseña Chile y hace clases de historia en el Colegio Pedro Apóstol de Puente Alto, Región Metropolitana. Ella es socióloga de profesión y eligió entrar al Programa de Liderazgo Colectivo de Enseña Chile luego de trabajar investigando sobre educación. Su llamado fue a conocer el problema desde el terreno y aportar llevando oportunidades a sus estudiantes. Por eso, en medio del proceso constituyente trabajó por crear espacios de participación, dialogo y reflexión para los estudiantes con el fin de llevar la discusión país a su colegio. Tras esa experiencia, se hizo parte del equipo a cargo del Plan de formación ciudadana y uno de los objetivos que se ha propuesto es generar más espacios de participación para las estudiantes.
«Quiero que las estudiantes participen, que se hagan escuchar, que levanten sus demandas, pero desde el colegio y desde su propia tribuna: centros de estudiantes, sus propios cursos, las salas de clases, entregando una opinión, etc. Pero también creo importante el rol de los colegios en esto, el cómo abren esos espacios para que las mujeres entren ahí», explica sobre su motivación. «Como profesoras tenemos el rol de eliminar algunos roles de género dentro de las salas de clases, ser conscientes de que existen y que afectan a nuestras alumnas e intentar que dentro de nuestra sala de clases eso no ocurra», concluye la docente.
