Actualmente, mi trabajo me permite estar en contacto con comunidades educativas y conocer desde el terreno sus realidades. En esa labor conocí a un estudiante que llamaré Matías (para resguardar su identidad) y que vive en Chile desde hace dos años en la Región de Magallanes
Una vez en fin del mundo, la Región de Magallanes, Matías ingresó a un colegio científico-humanista para luego cambiarse a un Liceo Politécnico, con el fin de tener una especialidad e insertarse en el mundo laboral. Mientras esto ocurría en su vida, Victoria, una profesora de Santiago, decidía partir al sur a través del Programa Enseña Chile para hacer clases de Administración Pública, movilizada por disminuir esa brecha educativa que tanto nos duele.
Un encuentro que sin duda puede parecer fortuito y que, sin embargo, no lo es. Como esta historia tenemos cientas en la historia de la Fundación Enseña Chile. Contamos con docentes y profesionales movilizados por las ganas de construir un país menos desigual y, por otro lado, conocemos a miles de estudiantes con ganas de surgir, de ganarle a las circunstancias.
En el Día de la Educación TP, volvamos a dar importancia al propósito y la visión de futuro y a no olvidar la gran misión que estos establecimientos educativos tienen con el desarrollo de competencias y herramientas para que sus estudiantes puedan desplegar todo su potencial. La Educación TP es el ejemplo de la frase “el aprendizaje también ocurre fuera de la sala de clases” y creo que hoy, más que nunca, es fundamental confiar en jóvenes como Matías. Apostemos por la educación para que un día el lugar donde nacen nuestros estudiantes no determine su futuro.
Mayling Tan
Coordinadora de Operaciones
Fundación Enseña Chile Patagonia