Compromiso, trabajo en equipo y pasión son parte de los aprendizajes que niños, niñas y jóvenes adquieren al momento de comenzar a practicar un deporte. Así opinan tres de nuestros profesores quienes trabajaron por el desarrollo integral de sus estudiantes desde distintas disciplinas.
El primer año que Tatiana Rieloff, Alumni Enseña Chile, hizo el taller de volleyball en el Colegio Marista Hermano Fernando de Alto Hospicio, una de sus estudiantes se destacó por sus habilidades. Stacy era una de sus jugadoras más responsables dentro de la cancha, pero fuera de ella tenía muchos problemas de conducta y sus notas no eran buenas. Debido a esto, a pesar de ser una de las líderes del equipo, no obtuvo permiso para viajar a una importante competencia en Santiago.
«Fue fuerte para ella, pero a pesar de todo asumió humildemente su error y siguió entrenando. Al año siguiente se notó un cambio muy positivo: comenzó a respetar a la autoridad, a participar en su curso y desarrolló su disciplina. El volleyball tuvo un impacto muy positivo en ella», cuenta Tatiana quien levantó este taller adicional a sus clases en la especialidad Técnico Profesional de Metalurgia.
El deporte está así ligado al desarrollo de habilidades socioemocionales de los estudiantes que los acompaña en su crecimiento integral. Este tipo de actividades permiten trabajar tres áreas a la vez: el acondicionamiento físico, el aprendizaje y el entretenimiento de niños, niñas y jóvenes.
Así lo ve también Carlos Adaos, profesor Enseña Chile de Matemáticas en el Liceo Los Andes de Melipeuco, quien realizó un taller de baby fútbol durante el 2019. Debido a las lluvias de la zona muchas veces no pudieron jugar y desarrollaron otras actividades vinculadas con el deporte. Incluso organizaron un campeonato para todo el colegio. «Liderazgo, organización y responsabilidad son cosas que se aprenden con la planificación deportiva. Los muchachos son capaces de hacer muchas cosas, hay que darles la confianza no más», reflexiona Adaos.
Sebastián Hernández, profesor Enseña Chile de Matemáticas en el Colegio Academia Tarapacá en Iquique, hace un taller de cheerleadeer en su establecimiento. Este deporte requiere de mucho entusiasmo, confianza y carisma, además de mucho compromiso. «Cuando en un equipo otros dependen de lo que haces comienzas a valorar el respeto. A los chicos les pasa y por eso les gusta mantener la disciplina, trabajar en equipo, sienten la exigencia y los hace sentir bien», cuenta Hernández.
Tolerancia a la frustración, liderazgo y respeto, suman a la gran variedad de habilidades que el deporte permite desarrollar en niños, niñas y jóvenes. Los profesores de Enseña Chile lo han vivenciado en las canchas junto a sus estudiantes, quienes crecen como niños, niñas y jóvenes integrales gracias a su compromiso con una disciplina.