Mientras trabajaba como periodista, Gabriela buscaba desempeñarse en un espacio donde pudiera conectar con su propósito. Así fue como decidió entrar a Enseña Chile e iniciar un camino en educación que continúa hasta hoy.
Comenzó realizando clases de manera voluntaria mientras estudiaba Periodismo en la Universidad Católica y, al ya estar inserta en el mundo laboral, decidió buscar oportunidades donde pudiera reconectar con la educación y su propósito. Fue así como decidió postular al Programa Enseña Chile en 2016: “me motivaron a postular estas ganas de buscar algo que me acercara al mundo de la educación y que me conectara con un propósito mayor”, relata.
En 2017 ingresó al Colegio San Alberto Hurtado de la Fundación Belén Educa como Profesora de Lenguaje y Comunicación, afirmando que esta experiencia fue “muy movilizadora.” Según como ella misma explica, encontró desafíos gigantes que no hubiese esperado, pero que finalmente fueron el motor para su crecimiento dentro del programa, el cual describe como uno de los momentos que más le han marcado en su vida. “Fui con esas ganas de aportar, de darlo todo. Pero al final, la que más terminó aprendiendo, fui yo”, cuenta.
Luego de pasar dos años en el aula como parte del programa de Enseña Chile, Gabriela sacó su pedagogía, estudiando en el Programa de Formación Pedagógica, obteniendo el título de profesora de Lenguaje y Comunicación. Tras ello, ingresó al equipo de profesionales de la fundación como Mentora de Formación en la Región Metropolitana, acompañando a otros profesionales que, como ella, se aventuraban en la sala de clases. “Eso se desglosa en varios ciclos de acompañamiento en terreno y también uno a uno. Hay acompañamiento en investigaciones y observaciones de clases”, explica, destacando que el foco siempre está en las y los estudiantes y cómo aprenden.
Desde 2022 Gabriela acompaña al equipo de mentoras y mentores de formación de la fundación como Mentora de Mentores. Al preguntarle cuál cree que es el sello de este equipo, menciona que “son personas que creen que es posible generar cambios y que se la juegan por generar impacto en sus profesores”. Por último, destaca que son personas proactivas, responsables, y con ganas de sacar adelante a las distintas comunidades, e insertarse e involucrarse con ellas.