El Liceo Padre Alberto Hurtado Cruchaga de Pica, Región de Tarapacá, trabaja con Enseña Chile desde este año. Es el primer establecimiento de contexto rural con el que colabora la fundación en esta región y tiene contratados a cuatro de sus profesores. Este liceo es el único de Pica, un pueblo pequeño formado en torno a un oasis que se encuentra en medio del desierto y que tiene una ubicación geográfica compleja. En él se educan a 434 estudiantes del sector y de varias localidades cercanas, muchos de ellos pertenecientes a pueblos originarios y varios de origen extranjero.
Trabajar en este contexto desafiante requirió de un alto compromiso de parte de los profesores de Enseña Chile, quienes llegaron al establecimiento como parte del Programa de Liderazgo Colectivo de la fundación que les entrega formación en liderazgo pedagógico, personal y sistémico mientras hacen clases en contextos de alta vulnerabilidad por dos años.
«Hubo un compromiso de parte de ellos desde el primer día. Se notó las ganas que tenían al haberse trasladado desde lejos a un oasis, era un cambio total para ellos. Se nota que desde Enseña Chile hay un trabajo de fomentar y fortalecer el trabajo docente, hay cosas que se ven que ellos_ son muy asertivos con lo que hacen y siempre preguntan en caso de duda. Además, si se cometen errores, existe la resiliencia de parte de ellos para asumirlos y corregirlos. El equipo de profesores de Enseña Chile que tenemos en el liceo fortalece nuestra comunidad, es participativo, responsable y muy receptivo a los mensajes que les estamos entregando», destaca Óscar Fernández, jefe UTP del establecimiento.
La experiencia del Liceo Padre Alberto Hurtado Cruchaga de Pica siendo parte de la Red de Colegios Enseña Chile ha sido calificada por su equipo directivo como positiva. Destacan el aporte que hacen los profesores de la fundación a su comunidad y aseguran querer seguir trabajando con esta alianza. «El hecho que sea una red para nosotros es bien importante por qué están en tiempo real apoyando cualquier problemática que surja en nuestra comunidad. Nos dan la instancia de poder revisar e incorporar su trabajo, tomar las fortalezas, aprovechar las oportunidades y eso aplicarlo a nuestro contexto. También agradecemos las instancias de reuniones donde nos colaboran, e incluso de cursos y actualizaciones que ponen a nuestra disposición», agrega Carolina Guerrero, directora de la institución.
Tras esta experiencia tanto el liceo como la fundación buscamos mantener esta alianza y hacerla crecer a futuro. «Para nosotros es super relevante porque queremos estar donde más se necesite. Además, el equipo directivo del establecimiento demostró tener muchas ganas de mejorar la calidad de la educación en el liceo, con una mirada más integral del desarrollo de los niños que les pudiera abrir más horizontes y mostrar un mundo un poco más allá del contexto en el que viven, lo que está muy alineado con nuestro propósito», destaca Paulina Olguín, directora de Enseña Chile Tarapacá.