Carmen Loyola conoció Enseña Chile mientras estudiaba periodismo en la Universidad Católica. Fue parte del equipo de reclutamiento del programa en los años 2010 y 2011, sin imaginar que, más adelante, ella formaría parte de la red de profesores. En su último año de carrera, tras visitar una sala de clases en un colegio en Lo Barnechea, comenzó a cuestionarse su futuro y a preguntarse si, en vez de comenzar directamente en los medios, podía contribuir desde la educación.
Después de realizar su práctica en la revista Domingo de El Mercurio y vivir un año en Australia, Carmen sintió una necesidad profunda de aportar de forma concreta a su país. Enseña Chile le ofrecía lo que necesitaba: acompañamiento, formación y la posibilidad real de generar cambios. Así, decidió postular y comenzar una nueva etapa.

Carmen cuenta que su experiencia como profesora fue desafiante y transformadora. “Fue una montaña rusa, llena de emociones y aprendizajes. Fue también radical, ya que cambió mi rumbo laboral y mi forma de aportar a un país más justo”. Hizo clases de Lenguaje en 3° y 4° medio en el Liceo Antonio Hermida Fabres, en la comuna de Peñalolén, Región Metropolitana. También lideró electivos y talleres para estudiantes de 1° medio. En sus palabras, “ser profesora me abrió un mundo de posibilidades para enseñar y acercar oportunidades a mis estudiantes.”
Los primeros meses fueron especialmente duros, al nivel que, a tres semanas de haber ingresado, pensó en renunciar. Pero una conversación con su mentora – que hoy es su amiga – la marcó profundamente: “¿Tú ves una fila de profesores postulando a este colegio para hacer clases?”. Esa frase la hizo tomar una decisión definitiva: quedarse, comprometerse y dar lo mejor.

Asumió la jefatura de un 4° medio, gestionó actividades para ampliar los horizontes de sus estudiantes —desde trekking en la Región Metropolitana hasta charlas con profesionales de diversas áreas— y se convirtió en una figura clave para muchos de ellos. “La sala de clases es una mini sociedad donde los docentes podemos construir, junto a nuestros estudiantes, la sociedad que queremos, por eso la educación cambia, y cambia a las personas que viven en ella”, manifiesta Carmen.
Hoy, nuestra alumni es directora de formación práctica de la Facultad de Educación en la Universidad San Sebastián. Lidera el diseño y seguimiento del sistema de prácticas para más de 5.000 estudiantes de pedagogía. No tiene dudas: su paso por Enseña Chile fue el punto de inflexión que la llevó a comprometer su vida profesional con la formación de docentes y la mejora del sistema educativo. “Siempre agradeceré haber pasado por Enseña Chile, porque hizo que mi vocación y desarrollo profesional tomaran un giro que hacen que día a día mi trabajo tenga sentido”, dice.

Durante su tiempo como profesora, Carmen desarrolló habilidades esenciales que hoy marcan su liderazgo: gestión, resolución de conflictos, trabajo en equipo y una profunda vocación de servicio. Aprendió, además, que no se está sola en la misión educativa y que involucrar a estudiantes, apoderados, redes y familias es parte clave del proceso.
A quienes están pensando en postular a Enseña Chile, Carmen les dice que, si bien hay mucha incertidumbre, el tener una red y un plan de acompañamiento lo hace más fácil. Por otro lado, llama al compromiso. “Dejar esto a medio camino genera un daño muy grande. Las comunidades educativas necesitan compromiso, apoyo y personas que estén comprometidas. Nuestros estudiantes necesitan ver que es posible”.

Last modified: junio 25, 2025