Termina el primer semestre y, como en todo año escolar, podemos identificar desafíos. Los primeros diagnósticos académicos muestran la brecha existente en los aprendizajes de las y los estudiantes respecto al currículum propuesto, donde la desigualdad persiste. Estos escenarios son aún más preocupantes cuando enfrentamos además el problema de ausentismo crónico en nuestros estudiantes.
¿Cómo pueden nuestros profesores ver oportunidades en estos desafíos tan complejos y multicausales? En Enseña Chile vemos una posible respuesta en la voz de nuestros y nuestras estudiantes. Por esto, nos preguntamos: ¿Cómo responden ellos y ellas al estilo de enseñanza de su profesor? Para responder la interrogante, utilizamos la encuesta de estudiantes Tripod 7C, la cual evidencia que el vínculo con el docente, la confianza y su protagonismo en la sala de clases, son el motor del aprendizaje de niñas, niños y jóvenes. Esto se suma al desafío de la disminuida autopercepción que tienen con respecto al desempeño propio y de sus compañeros en clase, aspecto que debemos abordar para generar un cambio significativo.
Este análisis entrega focos claros para abordar los desafíos que tenemos en la región. Primero desde la sala de clases para luego involucrar a cada vez más actores y avanzar colectivamente. Ahí está la clave: desde los territorios unir fuerzas y trabajar en conjunto en torno al objetivo común más grande de nuestra sociedad: que un día todas las niñas y niños en nuestro país reciban educación de calidad y que sus aprendizajes les permitan alcanzar el futuro que sueñan.
Dailyn Olivares Cabrolier
Mentora de Formación
Enseña Chile