José Tomás Hidalgo, ingeniero civil industrial de la Universidad Católica de Chile, estaba en su último año de carrera y a punto de terminar su práctica profesional, cuando pensó en tomar el desafío de enseñar. Si bien su experiencia en la universidad había sido buena, sentía que su profesión no respondía a las grandes necesidades de transformación que necesitaba la sociedad.
Fue en ese momento de su vida en que conoció a Enseña Chile en una charla que Tomás Recart, fundador y Director Ejecutivo de la fundación, hizo en su universidad. “Dijo que, si queremos un sistema de educación más justo, tenemos que ser nosotros mismos quienes lo creamos”, recuerda.
Ingresó al Programa Enseña Chile en 2017 como profesor de matemática y física en el Liceo Politécnico San Joaquín y el Liceo San José (actualmente Liceo Lo Barnechea). Al recordar su experiencia, cuenta que se le vienen tres cosas a la cabeza: el gran reto que significa enseñar y aprender en Chile, lo gratificante que es ver resultados y lo esperanzador que es trabajar en red y ver personas conectadas por un objetivo en común.
“Uno puede ver inmediatamente el trabajo en la sala de clases. El brillo en los ojos de alguien que aprendió es de las cosas más mágicas que he visto en mi vida. A pesar de lo difícil, se puede. Hay miles de estudiantes y profesores trabajando y haciendo aportes todos los días. Sueño con canalizar esos esfuerzos para transformar lo que no funciona en el sistema actual”, asegura.
Actualmente José Tomás está en Harvard estudiando su maestría con doble grado en Administración Pública y Administración de Empresas. Asegura que hay aprendizajes adquiridos en su paso por la sala de clases que lo acompañan a diario y destaca, sobre todo, las habilidades socioemocionales que se desarrollan durante el programa: “aprendí a trabajar en equipo, tanto con los profesores de mis colegios, como con los colegas de Enseña Chile. Hay ideas buenas en todos lados y hay que entender cómo potenciarlas y desarrollarlas en conjunto”, cuenta.
Por otro lado, agrega el desarrollo de ciertas habilidades claves para su crecimiento profesional, como la perseverancia, la tolerancia a la frustración y la empatía. Luego de su paso por la sala de clases, José Tomás asegura que es “mucho más capaz de trabajar con otros, desarrollar confianza y lazos que me permiten conectar con personas de todas partes del mundo. Soy capaz de intentar y fallar sin pensar que el mundo se va a acabar”.
Sin duda la experiencia de José Tomás en el Programa Enseña Chile estuvo llena de momentos significativos, pero uno de los que más recuerda es cuando en primer año, en el Liceo Politécnico San Joaquín, las y los estudiantes debían presentar un proyecto en el marco del día de las matemáticas. “Al final, el día de la presentación, estaban todos muy orgullosos explicando conceptos tremendamente complejos con palabras increíblemente simples. Lo mejor fue ver sus ganas de enseñar al resto del colegio. Ese día había una competencia para las mejores exhibiciones y ¡mis estudiantes ganaron el primer lugar!”
“No es un camino fácil, pero nunca he trabajado en algo tan gratificante. Ver historias de éxito y ver cuando los estudiantes se dan cuenta que aprendieron, es de los mejores regalos que he tenido en mi vida”, cuenta José Tomás sobre su experiencia como profesor. Asegura que los dos años te muestran lo difícil que es trabajar en el sistema educativo y lo desafiante que es también para los propios estudiantes, pero que los resultados te llenan de energía y de ganas de cambiar la educación en Chile. “Quien quiera transformar es más que bienvenido a ser parte de la red y trabajar juntos”.
Last modified: mayo 30, 2025
